Chandra Center

La Quintaesencia del Sendero

Kapila es el primer y principal Maestro del Planeta. Las enseñanzas que dio a su madre constituyen un acercamiento holístico a la Verdad. Contienen en sí la cuatro dimensiones de la Sabiduria: Bhakti (devoción), gnana (conocimiento), vairagya (desapego) y Yoga. El Yoga de Kapila se conoce popularmente como Sankhya con sus cuatro dimensiones, tal como se dijo en el Bhagavatha, fue presentada por el autor en Tarragona (España) y puede encontrarse en el libro titulado (SANKHYA, la doctrina sagrada). Este libro contiene una conversación entre Kapila y su padre, Kárdama. Esta conversación tiene un profundo valor y es tambien una enseñanza en forma de CÁPSULA. Cuando el autor disertó sobre ella, un grupo de ardientes oyentes alemanes pidió la enseñanza en forma de libro. El libro está dedicado a los estudiantes de sabiduría.

Preludio

Kárdama, que es un prajapati, de quien nacio Kapila como su décimo hijo, Kapila es el “Señor de la Síntesis” (Narayana). nació de Kárdama como el digno décimo hijo. Le precedieron nueve hermanas, que representan la naturaleza nónuple. La naturaleza nónuple surge como óctuple. A la novena se le conoce como “naturaleza primordial” Aditi, Mula Prakriti. Las tres cualidades emergen de esta naturaleza. De estas tres cualidades surge la naturaleza quíntuple. 5+3+1=9. El noveno en sí mismo es el surgimiento de lo que está mas allá, lo que se llama cero o diez. Simbólicamente Kapila es el décimo, aquel que preside sobre la naturaleza nónuple.

Kárdama, que es eun prajapati,es la representación del numero diez (diez son los prajapatis).

Se decía que Kárdama había nacido de la espalda del Creador, lo que significa la consciencia de fondo del creador.

Kárdama es el prajapati que presidió sobre la solidificación de nuestro planeta desde su estado acuoso y de lodo. Él inauguró el nacimiento de los humanos en el planeta. La palabra “humanos” significa los hombres nacidos en la materia de lodo. Humus significa barro en griego. Al hombre que ha nacido en el humuse le llama humano.

Antes del advenimiento de Kárdama, la tierra era un medio globo etérico, formado hasta el Ecuador, que se movía como un platillo alrededor del Polo Norte. A partir de la época de Kárdama, se formó como un globo completo al formarse el Polo Sur.

Kárdama cumplió con el objetivo de encarnar en el planeta e intentó retornar al estado de lo Absoluto Parabrahman.  El Bhagavata Purana dice que Kárdama se unió al estado de Absoluto, Parabrahman, incluso en el Kalpa anterior y que él nunca tuvo intención de volver a la creación en la creación siguiente. Pero cuando la creación comenzó, Kárdama, que estaba en profundo samadhi, oyo un voz que le decia que era necesario que descendiera a la creación y realizara una gran parte en ella, que era dar nacimiento a nueve principios femeninos, quienes en su momento se casarían con los nueve sabios viidentes, siete de los cuales constituyen la Osa Mayor y los otros dos brillan para inspirar a los seres. 

Kárdama también oyó que, como regalo por llevar a cabo esa tarea de dar a luz a nueve hijos, Narayana, el Señor mismo, nacería como su décimo hijo. Kárdama sonrió con el papel que el Señor le daba, y se obligó a llevarlo a cabo. El sabio Kárdama cumplió con el trabajo ordenado. Le pidió permiso a Kapila, el Señor, par regresar a la morada eterna. Los diálogos entre el padre y el hijo, Kárdama y Kapila, son de gran valor para los buscadores de la Sabiduría y para aquellos que busca la autorrealización y la autosalvación. Esta obra está pansada para estos buscadores.

La Plegaria y la Súplica de Kárdama 

Un buen día por la mañana, sabiendo perfectamente que el Señor de Sintesis, Narayana, se habia ofrecido para nacer a través suyo como Kapila, Kárdama llevó a su hijo de siete años a un lugar solitario y montañoso. Se postró ante Kapila y le dijo lo siguiente:

“Tu eres en verdad Narayana el Señor de Síntesis. En ti todos los mundos existen. De ti surgen,crecen, y en ti tambien se disuelven. Tú eres Vasudeva el  morador interno de todos los seres. Tú existes en todos los seres, y les das una autoconsciencia localizada (Sankarshana). Tú brillas en ellos como su propia consciencia. Tú eres el arco cuádruple”.

“Los seres que habitan el mundo no pueden verte porque están absortos en la belleza y el placer mundanos. No conocen las bases de su existencia. No saben cómo funcionan la vida y la luz en ellos. Creen que la vida y la luz que hay en ellos es suya. Tú eres su propia existencia. La vida y la luz que ellos utilizan te pertenecen. Son desagradecidos con la misma base de su existencia, de su vida y de su luz. Están absortos en las actividades mundanas y se queman en la rueda del mundo. Pasan por innumerables encarnaciones de nacimiento y muerte. Sus acciones de buena voluntad complacen a los devas, y así se les dirige hacia el camino de la luz. Esta dirección los lleva al camino del yoga. A traves de las regulaciones del yoga, y durante cientos de encarnaciones, se establecen en contemplación interna y en meditación, relacionándose contigo. Ellos te experimentan como la realización de sus meditaciones. En su momento se dan cuenta de que, realmente, sólo tú existes como ellos y que ellos no existen sin ti”.

“Eres un gran ser que se ha dignado nacer a través de mí. Es por tu gracia que has nacido como mi hijo. Tu gracia es incondicional. Nos honras sin importarte nuestro mérito. De hecho tu gracia no tiene causa. Supe que nacerías a través de mí, y tú naciste y cumpliste. Lo que escuché en la cueva de mi corazón se ha hecho realidad, la palabra se ha hecho carne y hueso y está ante mí. Tu compasión no tiene límites”.

“Al haber nacido de esta manera, no todos pueden comprender que tú eres verdaderamente la Palabra que se ha rodeado de las capas de la naturaleza y ha nacido como niño. Mientras vemos al niño en ti, te perdemos. Si te vemos a ti perdemos al niño en el que tú te has formado. Si esto ya es fascinante, ¿cuánto más fascinante habrá de ser poder ver tu cuádruple forma cósmica?”.

“Cuando tú desciendes como Avatar, nadie experimenta tu forma y tus cualidades mundanas. No podemos percibir tu amor, afecto, generosidad, valor estabilidad y estatura. Nadie puede apreciarte como alguien que está más allá de la naturaleza. Es una lástima que siempre que la Verdad toma forma, los contemporáneos vean la forma y pierdan la Verdad. Creen firmemente que tú eres uno más entre ellos. Unos pocos creen que tú eres un poco mejor que ellos. No pueden aceptar que estás con ellos, pero que no eres uno de ellos”.

“El pez que está en el estanque piensa que la luna que se refleja en el estanque es como uno de ellos, con un poco más de brillo. Pero la luna nunca está en el estanque. Sólo es un reflejo. Tú te reflejas a ti mismo en el mundo. Nunca estás realmente en él, como la luna que tampoco está en el estanque. Tus acciones y obras estan más allá de tu forma es sólo el medio a través del cual tú llevas a cabo obras de naturaleza invisible. Aparentemente, vemos que tienes dos manos, pero existen innumerables manos invisibles que trabajan junto a las manos visibles”.

“Los sabios videntes te alaban como el que tiene mil manos, mil ojos y mil pies:

“Sahasra sirsha purushaha saharasksha sahasra paad Sabhumim vishwato vritwa atyatishtha da shangulam”.

(Purusha Suktham, estrofa 1)

“Los sabios videntes los rishis, los mahatmas contemplan en el Dios Omnipresente y Omnipotente. Poco se dan cuenta de que Él puede hallarse en la forma en que decida estar. Para proteger a los hombres de buena voluntad, tú continúas tomando forma de acuerdo al tiempo y la necesidad. Según lo que tengas que hacer, te das forma a ti mismo”.

“Tanto si estás en la forma o fuera de ella, en ningún caso se te puede venerar o alabar por completo. Cualquier alabanza o veneración es sólo un esfurezo para estar en sintonía contigo y para quedar absorbido en ti. El conocimiento, no importa cuán grande sea no es suficiente para alabarte”.

“Tu eres el Maestro (Iswara). El tiempo, el espacio, la naturaleza y la fuerza surgen de ti. Tú presencia en el espacio lo hace potencial. La naturaleza tambien se desglosa en tres cualidades y cinco elementos debido a tu presencia. Tú eres la rueda del tiempo en la cual todo lo que es creado nace, crece, se mueve y se disuelve. Tú eres la base de todo. Tú no tienes ninguna otra base. Tú eres el único soporte de la creación. Tú eres el alma de la creación. Por tu poder tú sostienes todos los mundos en tu vientre. El poder, el conocimiento, la habilidad de ejecutar y el tiempo son obra de tu mano. Tú eres aquel al que todos ven. Me postro ante ti”.

“Habiendo cumplido el propósito de mi encarnación, deseo seguir el camino de regreso, tal como lo hicieron aquellos que te conocen. Permíteme entrar en profunda contemplación. Permíteme entrar en la cueva de mi corazón y contemplar en tus pies de loto. En esta contemplación, permíteme estar más allá de los placeres y dolores mundanos. Permíteme moverme con aquellos que están comprometidos contigo en penitencia. Permíteme ir a los lugares donde estos hacen penitencia. Permíteme regresar a la morada eterna, que Tú eres”.

Kárdama se arrodilló ante Kapila, con las manos unidas, solicitando el permiso necesario para regresar a la morada eterna.

La Respuesta de Kapila

Después de escuchar al prajapati Kárdama, Kapila, complacido con el por su conocimiento, devoción, desapego y aspiración sonriendo le respondió de la siguieste forma:

“¡Observa que mis acciones no tienen causa! Estoy más allá del mundo de causa y efecto. Indudablemente, he nacido de ti en conformidad con lo que oíste en tu penitencia. Cumplir con los deseos genuinos de mis devotos no es sino mi naturaleza. Mi compasión hacia los seres no tiene límites”.

“He nacido como un sabio igual que tú, no para mi beneficio, sino para beneficio de la iluminación de los sabios, los videntes los mahatmas y aquellos que hacen penitencia. Yo he descendido para hacerles saber a estos sabios y videntes que, de tanto en tanto, tomo forma para dejar claro el camino hacia lo Divino. Los sabios y los videntes tienen que saber que yo no sólo soy omnipresente y omnipotente, sino que también, si es necesario, me hago presente en una forma para guiar de nuevo a los seres en el camino de la Verdad. Cada vez que el camino a la Verdad se hace confuso y oscuro, yo tomo forma voluntariamente y doy un nuevo camino eliminando los intrincados conceptos que los intelectuales construyen en torno al sendero.

De tiempo en tiempo el camio hacia la Verdad se nubla porque hay demasiados intérpretes y lectores de la Verdad. En todas estas situaciones, yo desciendo de nuevo para bien de los devotos, para estabilizar su voluntad, para que se encuentren la verdad no contaminada por multitud de acróbatas intelectuales.

“Sabe que aquellos que creen en mi naturaleza omnipresente que todo lo impregna tienen que ganarse el toque de un Maestro para lograr la paz y la realización necesarias. Sin el toque de un Maestro los conocedores no pueden mantenerse estables en su samadhi aunque practiquen el Yoga tal como se prescribe. Es su fe en mi la que los estabiliza en el Yoga y no sólo el conocimiento y la práctica del Yoga. El camino es para aquellos que tienen una fe sólida. Se mantiene como un misterio para aquellos que tienen conocimiento, pero no fe. El propósito de este Avatar es permitirles conocer el mundo y la esencialidad de un Maestro para encontrar el camino a la Verdad y seguirlo”.

“Como Maestro guío a seres del mundo a la Verdad de forma gradual, para que ellos me encuentren en el mundo y más allá. Ellos se dan cuenta de que no hay nadie más que yo en toda la creación”.

“Deseas regresar, habiendo complido con el  propósito de tu encarnación. Tu deseo se cumplirá, porque tu en verdad has cumplido con el propósito de tu encarnación. Has decidido regresar. El momento es perfecto. Puedes tomar el camino del yoga. Puedes ser un renunciante. La renunciación no es abandonar la actividad. La verdadera renunciación está en abandonar los frutos de la acción y en abandonar el instinto de iniciar la acción. Cuando la renunciación es una acción doble, la acción continua sucediendo a través nuestro. Cuando uno cesa de ser un hacedor, el hacedor es reemplazado por el observador, que observa todo lo que le sucede a sí mismo. Permanece, pues, como un renunciante”.

“Visualízame como Iswara, (Maestro), Parameswara (el Maestro del transfondo). Visualízame como la luz principal. Al mismo tiempo visualízame como Aquel que está escondido en la cueva del corazón de todos los seres. Visualízame en tu misma cueva del corazón. A través de estas multiples visualizaciones, las impurezas que hay en ti son eliminadas. Encontrarás la entrada en tu interior y me encontrarás en la cueva como tu propia luz”. 

“Visualízame como aquel que preside sobre el centro del loto del corazón dentro del antahkarana. Con esta visualización tu mente y tus sentidos se harán obedientes, y con el brillo de tu mente me podrás ver como el que resplandece en ti. Relaciónate conmigo en ti e intenta permanecer cerca de mí, relaciónate conmigo en ti mientras estés en contemplación. Relaciónate conmigo en los alrededores cuando estés en la objetividad. En todo caso, permanece en relación conmigo. Esa relación permite una unión gradual. Tenderemos a estar juntos, y en tal unión viviremos y nos moveremos hasta que llegue el momento en el que te disuelvas en mí. Te verás liberado de tu identidad individual qu ees sólo aparente”.

Kárdama, con devoción, dio la vuelta alrededor de Kapila con las manos unidas. De esta manera se despidió de Kapila. Asumiendo el silencio y sin hacer ruido, entró en el bosque cercano.

La Práctica de Kárdama

Lentamente y en silencio, Kárdama se retiró al bosque. Se convirtió en una persona sin hogar. También abandonó su rutina diaria. Adquirió la práctica de ver al Uno en su interior y alrededor. Se movía en estado contemplativo. Se sentaba en contemplación siempre que así lo sentía. Deambulaba por los aledaños con el sólo impulso interno de observar al Uno en los alrededores. Bebía cuando había agua y comía cuando las frutas y las hojas caídas quedaban a su alcance. Se liberó del programa definido de comer y beber. No pensaba ni en comer ni en beber. Dejó de buscar comida y agua.

También se deshizo de toda propuesta y vagaba por el bosque desprovisto de cualquier plan o programa. Renunció a toda su inteligencia mundana. Su mente e intelecto se mantuvieron en sintonía con el Uno que está fuera y dentro. También renunció a la facultad de discriminación y a la ciencia de la sabiduría que había en él. Siempre estaba ocupado en su contemplación de la luz. De vez en cuando se encontraba en el bosque con sabios, videntes y mahatmas. Se dedicó a deliberar y experimentar con ellos la bendición del mundo.

A su debido tiempo la consciencia de Kárdama se desplazó de su cuerpo sentidos y mente, a buddhi. Experimentó la hermandad de todos los seres a través de su contemplación en el morador de las formas. También experimentó el verdadero sentido de la paz. Su consciencia estaba en paz, era estable y no sufría ni siquiera un poco. En este estado de paz de consciencia, experimentó al Uno Omnipresente. Se dió cuenta de que el mundo no es sino la forma de ese Uno Omnipresente. En cualquier dirección en la que mirase, podía ver al Uno y sentir que, verdaderamente, el Uno existe como todo.

Esta vibración de consciencia estable y pacífica construyó gradualmente un cuerpo de luz desde el interior. Kárdama se estabilizó en él, y a su debido tiempo dejó la funda de carne y hueso. Hasta la fecha, el prajapati Kárdama permanece en su cuerpo de luz para guiar a los seres en el camino del yoga y la inmortalidad.

Una Plegaria a Kárdada

En el Rig Veda, en el himno Sri Suktam hay una plegaria a Kárdama que dice lo siguiente:

“Kardamena praja bhuta mayi sambhaba kardama Sriyam vasaya me kule mataram padma malineem”

Significado: ¡Oh prajapati Kárdama! Por favor, nace en mi con tu luz resplandeciente para que la Madre resida en este cuerpo de luz, sosteniendo los lotos completamente abiertos.

Esta es la plegaria que permite formar un triangulo entre el devoto, el prajapati Kárdama y la Madre Divina. La presencia de Kárdama posibilita la formación del cuerpo de luz. Una vez se ha formado el cuerpo de luz, todos los chakras (centros) se despliegan en lotos desde Sahasraraa Muladhara, lo que permite al devoto experimentar una gran visión dentro y fuera. 

Las personas que se sientan inclinadas pueden entonar este himno regularmente antes de meditar en la luz.

K. Parvathi Kumar